¡ · N U N C A · N A D A · E S · S U F I C I E N T E · !

20090117



Una gallera tan antigua y digna. Ahí, con sus cuatro cuerdasal viento. Cernícalos ciclópeos se aproximaron a la proa. Nadie soplaba un tango por aquel viejo saxofón.
El tintineo de las copas invitaba al vino. Tú no estabas ahí.
El minotauro se acercaba corriendo y agitando su mano.
No otra vez.
Tu mano se encontró con la mía y y desperté exudando mi confianza por los poros.

Lauro Zavala